
Daniela Alanis Mendez
9 sep 2025
La FGR continuará con las indagatorias para determinar la procedencia de los bienes asegurados y deslindar responsabilidades.
Un operativo conjunto entre autoridades federales y estatales permitió el aseguramiento de armas, vehículos y fauna protegida en una mansión ubicada en el municipio de Centro, presuntamente vinculada a Ulises Pinto Madera, alias “El Mamado”, figura clave del cártel La Barredora.
Ulises Pinto Madera, conocido como “El Mamado” o “El Pinto”, inició su carrera en la seguridad pública estatal, donde se convirtió en jefe de escoltas de Hernán Bermúdez Requena, entonces secretario de Seguridad Pública de Tabasco.
Posteriormente, fue pieza clave en la estructura criminal conocida como “La Hermandad” o “Cártel Policiaco”, dedicada al tráfico de migrantes, trata de personas, distribución de drogas y extorsión.
Tras una ruptura interna con Bermúdez Requena, se formó La Barredora, con apoyo del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG). Aunque Pinto Madera se distanció, mantuvo influencia en operaciones estratégicas y acumuló propiedades de lujo en Tabasco, Jalisco y otros estados.

El 23 de julio de 2025 fue detenido en Tlajomulco de Zúñiga, Jalisco, por elementos de la Secretaría de Marina y la SSPC, bajo cargos de asociación delictuosa agravada.
De acuerdo con fuentes de seguridad, el cateo fue ejecutado por la Fiscalía General de la República (FGR) en coordinación con la Guardia Nacional (GN), el Ejército Mexicano, la Policía Estatal y la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa).
Durante la intervención, los agentes localizaron un arsenal compuesto por un arma larga, seis armas cortas y 210 cartuchos útiles. Además, fueron incautados un helicóptero, cuatro vehículos dos de ellos todoterreno, una retroexcavadora, un remolque y una motocicleta.

El hallazgo más llamativo fue el de animales exóticos, entre ellos una cebra, dos avestruces, una tortuga, ocho guacamayas y tres loros cabeza amarilla, especies protegidas por la legislación ambiental mexicana. La Profepa tomó custodia de los ejemplares para su valoración veterinaria y reubicación legal.
Hasta el momento, las autoridades no reportan personas detenidas.
Este operativo refleja la coordinación entre fuerzas federales y estatales en el combate al crimen organizado, además de la protección de especies silvestres que eran mantenidas ilegalmente como parte del patrimonio ostentoso de líderes criminales.
